miércoles, 12 de noviembre de 2014

El mar Caribe, el Festival del Burro y el solitario "George".

Jueves  30 de Octubre, hacia el mediodía llegamos a San Antero, ubicado a 70 Kilómetros de Montería, en las orillas del mar Caribe y en la desembocadura del río Sinú, además en el Golfo de Morrosquillo y en la Bahía de Cispatá. Cuenta con una temperatura promedio de  33°C. y una altura de 45 msnm. Basa sus ingresos en la agricultura, ganadería, pesca y turismo. Su flora y fauna son especialmente diversas por contar con la particularidad de ser uno de los pocos lugares en Latinoamérica en los que crecen 5 tipos de manglares.
San Antero nos recibió con una muy linda sorpresa, en la plazoleta contigua a la Iglesia se desarrollaba un concurso de Bandas Marciales Rítmicas. El concurso era parte de un grupo de actividades con las que una de las instituciones educativas del pueblo, celebraba la semana cultural. Los protagonistas eran los estudiantes de varios centros educativos de la zona, pues vinieron a participar planteles de los municipios vecinos.
No podíamos dejar pasar esta oportunidad para mezclarnos con los locales y disfrutar del evento tanto o más que ellos mismos.
La elegancia se hizo presente en las diferentes bandas que lucían el uniforme de gala y presentaban diferentes ritmos del folklor nacional e internacional, esforzándose por lograr el primer puesto.


Las bandas marciales rítmicas son aquellas que fusionan la banda marcial con elementos propios de las bandas rítmicas, introduciendo instrumentos folclóricos como tambora alegre, güiro, timbales y además ejecutan una coreografía diferente para cada ritmo.
La creatividad es bienvenida en este tipo de concurso, así,  los integrantes de las bandas están en la libertad de escoger los atuendos que consideren necesarios para en combinación con los ritmos elegidos, puedan impactar al jurado y al público. 
 La Bruja quiso que le enseñen a tocar los platillos…
Nos dirigimos luego unos cuantos kilómetros hacia la bahía misma de Cispatá. Allí encontramos Playa Blanca, un santuario natural en el que se respira total tranquilidad y serenidad, uno de los mágicos lugares que aun parece conservarse a salvo del turismo masivo. Y llegamos al mar Caribe.
En un breve recorrido por el camino que bordea la orilla del mar  encontramos dos lugares especiales, el primero la Casa de la Bruja del Mar.
 
El segundo y colindando con el anterior una pequeña casa en la que en sus exteriores contaba con una pérgola de dos pisos. Ese era el lugar en el que queríamos para pasar unos días...
.Averiguamos y dimos con el encargado, un hombre de unos 45 años, a quien le solicitamos nos permita quedarnos allí un par de días. No dudó ni solo momento, más bien nos dijo, acomódense como gusten y por cualquier necesidad, búsquenme para ayudarles…Juan Carlos, el nombre de este amable San Anterano, nos comentó que el dueño venia rara vez y que él estaba a cargo del mantenimiento y renta de la casa. Nos dijo con tono amigable, “quédense los días que quieran, ya me di cuenta que ustedes son personas serias” y se marchó.
¿Qué más podíamos pedir? La casa estaba de frente al mar, a escasos  8 metros de la orilla, con una espléndida vista a la bahía y tenía una pérgola de dos pisos con energía eléctrica para alimentar a nuestros equipos. Ciertamente no podíamos pedir más!
Con emoción armamos carpa en la planta baja de la pérgola, sacamos algo más de nuestro equipo y nos instalamos a disfrutar.
Un par de rones nos acompañaron mientras el Chef hizo de las suyas…
Y luego…
 Al mar…tomamos un delicioso baño cerca de las 10 pm… EL agua caliente, el cielo estrellado… La Bruja salió del agua para tomar esta foto para el recuerdo.
A la mañana siguiente, Don Dino se encargó de tener los jardines relucientes.
 Y la verdad sea dicha, decidimos relajarnos por completo. Nos la pasamos contemplando el mar, arrullados con el sonido de las pequeñas olas.
Ya entrando la noche, una fuerte lluvia se hizo presente, razón por la cual, decidimos subir la carpa al segundo piso de la pérgola para evitar que se moje, pues el viento lograba hacer que la lluvia baile a diferentes ritmos y ella parecía perseguir la carpa.
La Bruja no estaba muy bien, parecía que el resfriado había vuelto y con más fuerza, pues se sentía bastante afiebrada, por lo que recurrió al botiquín viajero y se auto-medicó. Amaneció rozagante… Don Dino en tono de broma mencionó: Hierba mala nunca muere…jajajajaja Sin embargo la mañana entera se la pasó en reposo y jugando con la cámara fotográfica.
 


Y para el medio día, ya estaba nadando en las tibias aguas del mar.
La tarde mostró una espectacular caída del sol, evento que tiñe de hermosas tonalidades el cielo.



Mientras ella disfrutaba de este evento natural tan bonito, Jairito dormitaba como bebé… Fíjense no más que lo rodea, su gaseosa favorita, Fanta y el vehículo de su Bruja, la escoba… jajajaja
 
Domingo 2 de Noviembre fuimos en busca de Juan Carlos, queríamos consultarle si podíamos quedarnos hasta el martes o miércoles y una vez consultado, él asintió gustoso, razón por la cual, regresamos a nuestra pérgola y montamos equipo completo.
Un delicioso sancocho de pollo fue el plato elegido para este día..
Logramos captar  a un hombre luciendo la típica vestimenta local.
También a dos mujeres, una vendía cocadas y la otra envueltos de maíz.
En la tarde Jairito dedicó tiempo para elaborar nuevos resortes del forro del remolque, aquí en plena acción.
Lunes 3 de Noviembre, listos para desayunar, un sabroso revuelto de choclo, tostadas, queso, agua panela y café. Nos acompañaba Elvis Presley con una de sus mejores canciones: Is Now or Never… Qué belleza la letra de esa canción y qué oportuna.
El día nos pasamos entrando y saliendo del mar y en la noche salimos a caminar por la orilla, en algunas partes la marea  golpeaba fuertemente  contra el borde del camino y en otras el agua llegaba mansamente.

Martes 4 de Noviembre, jugando con la cámara fotográfica captamos a una familia de pescadores.
Y Jairito decidió aportar con algunos arreglos a la casa, cambió las bisagras del portón de entrada y un tomacorriente que estaba en pésimas condiciones.
En el atardecer de este martes extrañamos el color rojizo intenso con el que  generalmente se pinta el cielo...
Era nuestra última noche en Playa Blanca así que decidimos hacer esta foto especial, la Bruja en acción. jajajaja
Miércoles 5 de Noviembre, fotografiamos nuestra alcoba, para recordar en lugar exacto de esos hermosos días y noches en Playa Blanca.
Para las 11 de la mañana estábamos listos para dejar este maravilloso lugar y continuar con nuestro andar, sin embargo desde la noche anterior nos molestaba sobre manera un pensamiento, dejar a “George”.
George, nombre con el que bautizamos a un perro que apareció por primera vez en "nuestra casa", el día Sábado, fue ahuyentado un par de veces por Jairito y otro par de veces por la Bruja, sin embargo, este animalito, no mostraba el más mínimo temor, más bien se marchaba con paso lento  con una desgana asombrosa. El domingo volvió a aparecer, esta vez nos fijamos más en su aspecto, lucia tan delgado que las costillas se dibujaban claramente bajo su piel, su cara tenia múltiples marcas... Decidimos dejar de ahuyentarlo y lo alimentamos. Desde su primera comida se volvió más efusivo, movía la cola todo el tiempo y buscaba las maneras para hacer que uno le acaricie… Pobre animalito, estaba tan necesitado no solo de comida sino también de afecto. En los días subsiguientes fue ganando confianza y se sentaba muy cerquita de nosotros. Cuando íbamos al mar, nos acompañaba, se quedaba en la orilla viéndonos gozar del agua y una tarde que salimos en La Nave, se quedó mirándonos y cuando llegamos dormía plácidamente cerca de nuestro equipo, las sillas, la hamaca, la estufa. Su ánimo y autoestima mejoraron, a tal  punto que la última noche, subió al segundo piso y durmió cerca de nuestra carpa. Fue precisamente desde esa noche que la preocupación se apodero de nosotros. Hablamos una y otra vez tratando de hallar una solución para este animal abandonado y finalmente nos quedábamos con el mismo amargo sabor, no podíamos hacer nada… no había una fundación que se encargue de animales callejeros, tampoco podíamos llevarlo con nosotros… Esa mañana que nos marchábamos, decidimos alimentarlo por última vez.
Comió un par de panes y los sobraditos de la noche anterior, movió su cola, nos miró, y el momento que abríamos el portón para sacar La Nave y marcharnos, George empezó su marcha primero, él nos abandonaba… Su andar era más ligero y seguro que el que tenía días atrás, caminaba más erguido, y estaba algo más fuerte. Nos preguntamos una y otra vez  de cómo él supo que nos marchábamos para siempre, como supo que era mejor que él se marchara primero. La Bruja quiso contener las lágrimas, y Jairito hizo la siguiente reflexión: Es  mejor de esta manera. buena suerte George!
A veces es mejor no sostener el llanto y como dice una canción de Joan Manuel Serrat: Y si te toca llorar, es mejor frente al mar...
A la salida de San Antero encontramos oportunidad especial de fotografiar una de las escenas que por años distinguió a este pueblo y que hoy ha mermado considerablemente por la presencia de las motocicletas: El campesino con su burro.
San Antero es reconocido a nivel nacional por su famoso Festival del Burro. El origen del festival es religioso: a principios del siglo XX se decidió ajusticiar, durante el Sábado Santo, a una representación de Judas que se paseaba en el pueblo montado sobre un burro. El escarnio concluía en una hoguera, donde era quemado por la infinita vergüenza de haber traicionado a Cristo. A esta representación se suman desfiles de burros disfrazados, concursos de danzas y comparsas, presentaciones folclóricas de decimeros, gritos de monte, cantos de vaquería, bandas de viento y conjunto de pitos y tambores. Concurso de las mejores burras y sus pollinos, coronación del rey y la reina burros. Se presentan igualmente imitadores de los sonidos del burro y otros animales. El burro, aparte de ser un emblema del Caribe colombiano, que le sirve al campesino sin chistar, aunque de vez en cuando rebuzne, el burro marca el humor y la cultura del pueblo.
He aquí una de las tantas vallas que promocionan este singular festival.
De aquí para Sincelejo y Mompox..
Eso es todo por ahora, nos vamos a seguir Disfrutando Sudamérica!

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Eres uno de nuestros cómplices, gracias por tus comentarios.